Pasaron 287 días. Nueve meses y medio. Casi una eternidad para un pibe de 17 años que vive para jugar al fútbol. Pero la espera llegó a su fin: Felipe Esquivel volvió a pisar una cancha de manera oficial después de haber sufrido una rotura del ligamento cruzado anterior de su rodilla derecha.
Esquivel ingresó en el partido de Quinta división ante Banfield (0-0) disputado el sábado, en el que sumó 11 minutos que valieron como una gran victoria personal para el pibe (tanto que hasta jugadores rivales aplaudieron su vuelta). Y también como un nuevo comienzo de cara a su reinserción en la Reserva de Marcelo Escudero, quien posiblemente le vaya dando rodaje en Inferiores hasta que recupere el ritmo necesario.
Esquivel no es un juvenil más. En River lo ven como una de las grandes apuestas a futuro. El club lo blindó con un contrato hasta diciembre de 2026 y una cláusula de salida que asciende a los 30 millones de euros. Porque tiene algo distinto. Porque su talento no pasó inadvertido ni siquiera antes de llegar a Núñez.
Felipe Esquivel, la nueva jova de River. Foto: Prensa River
Su historia comenzó en Chaco, donde dio los primeros pasos en Sarmiento de Resistencia y mostró una zurda mágica, con gambeta, pegada y capacidad para sacarse hombres de encima. Fue suficiente para que los captadores de River se movieran rápido y lo ficharan a principios de 2022.
Su crecimiento en el club fue veloz. Se destacó en Inferiores, fue convocado a la Selección Sub 15 y hasta le marcó un gol a Brasil en el Sudamericano de la categoría. Pero en ese mismo torneo, durante el partido por el tercer puesto ante Chile, llegó la pesadilla: un mal movimiento, dolor, estudios y el diagnóstico temido. Rotura de ligamentos. Desde entonces, todo fue esfuerzo, paciencia y rehabilitación. Largas tardes de kinesiología, entrenamientos diferenciados y la ansiedad que, a veces, se volvía insoportable.
Por eso, el reencuentro con la pelota en un partido oficial tuvo sabor a revancha. Fue sólo un puñado de minutos, sí. Pero significaron muchísimo. Porque son el primer paso de su puesta a punto final para volver a formar parte de la Reserva, en la que ya había tenido participación antes de la lesión. Y porque en Núñez lo siguen con atención, sabiendo que ese zurdo escurridizo que llegó desde Chaco todavía tiene mucho por dar.
Felipe Esquivel. Foto Instagram: @16.esquivel
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